El Servicio Geológico de los Estados Unidos reveló un estudio que concluyó que casi la mitad del agua que hay en los grifos del país tienen, al menos, un tipo de sustancia PFAS, las cuales pertenecen a un grupo de productos químicos que frecuentemente se usan en los utensilios que tienen antiadherentes y en revestimientos de cajas de comida rápida.
Según la agencia gubernamental, es el primero estudio realizado a pozos privados de agua no regulados y según su autora, Kelly Smalling, quien es hidróloga e investigadora, da una idea acerca de los riesgos que las personas corren con los PFAS cuando deciden tomar un vaso de agua del grifo de la cocina.
Según Smalling, la agencia gubernamental descubrió a través de este estudio que las concentraciones de PFAS eran similares entre suministros públicos y pozos privados, y son los estadounidenses que viven en zonas urbanas los que están más propensos a estar en contacto con ellos.
De acuerdo al Servicio Geológico de EE.UU., existen más de 12,000 tipos de PFAS y son conocidos como “productos químicos para siempre”, debido a su persistencia en el medio ambiente y su toxicidad, por lo que están relacionados con distintos problemas de salud.
Otros productos que contienen PFAS son aquellos que tienen propiedades impermeables o que son resistentes a las manchas, como por ejemplo: ropa, prendas impermeables, muebles, equipos para actividades al aire libre, cintas y cosméticos.
FOTO: EFE
