1. No descansar lo suficiente
A medida que los humanos envejecen tienden a dormir menos horas y, como si esto no fuera suficiente, los problemas laborales, económicos y de salud pueden afectar la calidad del sueño, una combinación que puede ser muy perjudicial para la salud.
2. Hacer varias tareas a la vez
En el competitivo y ajetreado mundo actual, la posibilidad de desarrollar varias tareas a la vez se ve como algo positivo. Sin embargo, esto puede ser “muy malo” para la memoria.
3. Caer en la monotonía
Contrario a lo que se pueda imaginar, el cerebro humano no está programado para recordar todo. Por el contrario es selectivo.
Aquellas acciones como recordar la contraseña que acabamos de cambiar para acceder a nuestra cuenta bancaria, teléfono celular o correo electrónico se hace más difícil a medida que pasa el tiempo.
4. Confiarse demasiado
“Las personas creen que su memoria es muy buena hasta que en algún momento de sus vidas se dan cuenta de que no es así”.
Y no es para menos, porque de acuerdo con el experto, el cerebro no está diseñado para recordar literalmente todo lo que vivimos, algo que sería una tarea muy ardua.
Además de combatir los cuatro hábitos antes mencionados, hay otras maneras de proteger nuestros recuerdos y gozar de una buena salud mental.