El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva que revoca la política de su predecesor, Joe Biden, y permite nuevamente el uso de popotes de plástico en el país. Durante la firma en la Oficina Oval, Trump argumentó que los popotes de papel son ineficaces, afirmando que “se rompen, explotan y no duran lo suficiente”.
La medida deja sin efecto la meta establecida por la administración Biden de eliminar los utensilios de plástico de un solo uso en agencias gubernamentales para el año 2035.
Trump defiende los popotes de plástico
El mandatario señaló que la preocupación ambiental por los plásticos en los océanos es “exagerada” y que su impacto en la vida marina es mínimo. “No creo que el plástico afecte mucho a un tiburón mientras nada y se alimenta”, declaró Trump.
Los ambientalistas, sin embargo, han alertado sobre los efectos negativos del plástico en los ecosistemas marinos. Según datos científicos, 12 millones de toneladas de plástico ingresan a los océanos cada año, representando un riesgo para peces, tortugas y aves marinas que pueden ingerir o quedar atrapados en los residuos.
A pesar de la evidencia, Trump ha rechazado las preocupaciones sobre la contaminación plástica, un tema que ha convertido en parte de su discurso político desde la campaña de 2020, cuando incluso comercializó popotes de plástico con su nombre.
Reacciones y futuro ambiental
Mientras firmaba la orden ejecutiva, el presidente estuvo acompañado por el secretario de Comercio, Howard Lutnick, quien sonrió mientras Trump expresaba su frustración con los popotes de papel. El presidente también compartió en redes sociales una imagen con un popote de plástico en una botella de refresco, acompañada de la frase: ”¡Muerto!”, en referencia a la política de su predecesor.
Trump ha tomado varias medidas en contra de regulaciones ambientales desde que asumió su segundo mandato, incluyendo la salida del Acuerdo de París y la expansión de la extracción de petróleo con su lema “drill, baby, drill” (perfora, bebé, perfora).
