Una jornada deportiva que debía ser motivo de orgullo y entusiasmo terminó en tragedia en Frisco, Texas, cuando un joven estudiante perdió la vida tras un incidente violento durante un evento de atletismo escolar.
El suceso ocurrió alrededor de las 10 de la mañana del miércoles 2 de abril en el campeonato de atletismo del Distrito 11-5A, organizado por la Liga Interescolar Universitaria (UIL), en el Estadio Kuykendall del Distrito Escolar Independiente de Frisco.
La víctima fue identificada como Austin Metcalf, un joven de 17 años y estudiante atleta de la Escuela Secundaria Memorial de Frisco. Sus familiares lo describieron como un chico ejemplar, con grandes aspiraciones deportivas y querido por su comunidad. Su hermano gemelo, Hunter, quien estuvo presente en el momento del ataque, relató entre lágrimas cómo intentó salvarle la vida mientras llegaban los servicios de emergencia.
“Lo sostuve hasta que llegaron los paramédicos… siempre fue como mi hermano mayor, aunque solo naciera cuatro minutos antes”, dijo Hunter. Su madre, Meghan Metcalf, también compartió su dolor: “Austin era brillante, tenía un gran futuro por delante. Los equipos universitarios ya lo tenían en la mira. Su sueño era jugar fútbol a nivel universitario”.
La policía de Frisco indicó que se le practicó RCP a la víctima y se le suministró sangre en el lugar, pero lamentablemente falleció poco después.
Sospechoso detenido y con fianza millonaria
El presunto agresor fue identificado como Karmelo Anthony, también de 17 años y alumno de la Escuela Secundaria Centennial. Actualmente enfrenta cargos de asesinato y fue trasladado a la cárcel del condado de Collin, donde se le impuso una fianza de un millón de dólares.
Anthony, quien también era jugador de fútbol americano, declaró que actuó en defensa propia. De acuerdo con el testimonio de un testigo, la confrontación se habría originado por una discusión bajo la carpa de uno de los equipos.
Según la declaración, Anthony habría advertido a Austin antes de sacar un cuchillo negro de su mochila y herirlo en el pecho. Posteriormente, el arma fue encontrada en las gradas, presuntamente lanzada por el atacante tras huir del lugar.
