En un desafortunado incidente ocurrido en las primeras horas del martes, una explosión sacudió las instalaciones de mantenimiento de Delta Air Lines cercanas al Aeropuerto Internacional Hartsfield-Jackson de Atlanta. El siniestro, presuntamente causado por el estallido de un neumático de avión, dejó un saldo de dos fallecidos y un herido.
Según informes preliminares, entre las víctimas fatales se encuentran un empleado de Delta y un contratista externo. Las autoridades locales, incluyendo bomberos y policías, respondieron rápidamente al llamado de emergencia poco después de las 5:00 a.m.
Delta Air Lines emitió un comunicado expresando su profundo pesar: “Nuestra familia Delta está de luto por la pérdida de dos valiosos miembros de nuestro equipo y por las lesiones sufridas por otro compañero. En estos momentos difíciles, brindamos todo nuestro apoyo a familiares y colegas afectados”.
Este trágico evento resalta la importancia de la seguridad en las operaciones de mantenimiento aeronáutico y plantea interrogantes sobre los protocolos de seguridad en instalaciones similares. Las investigaciones están en curso para determinar las causas exactas del accidente y prevenir futuros incidentes de esta naturaleza.
