La vicepresidenta y candidata presidencial demócrata, Kamala Harris, presentó sus “argumentos finales” de campaña ante una multitud cerca de la Casa Blanca, destacando las diferencias entre su plataforma y la de su oponente, el expresidente Donald Trump. Durante su discurso, Harris se comprometió a impulsar una reforma migratoria y mejorar la economía, prometiendo gobernar para todos los estadounidenses y trabajar con quienes no compartan sus puntos de vista.
El evento se celebró en el Elipse, cerca de la Casa Blanca, el mismo lugar donde, el 6 de enero de 2021, Trump alentó a sus seguidores antes de que estos atacaran el Capitolio. Harris resaltó la importancia de esta elección, afirmando que lo que está en juego es el “alma de la nación”, la cual, según ella, sigue amenazada por Trump, quien “intentó anular la voluntad del pueblo”.
En su intervención, Harris prometió que, de ser elegida, trabajará con el Congreso para aprobar una reforma migratoria que contemple un camino a la ciudadanía para trabajadores agrícolas y los llamados “Soñadores”. Además, enfatizó la necesidad de controlar la frontera de manera justa y responsable, al tiempo que reafirmó su intención de fortalecer la seguridad en la frontera y de perseguir a los cárteles responsables del tráfico ilegal.
Con esta última intervención, Harris busca atraer votantes destacando su visión de un gobierno inclusivo y dispuesto a cooperar con todas las fuerzas políticas para resolver desafíos críticos, como la inmigración y la economía.
