Charlotte, una madre de Suffolk, Inglaterra, cuya hija tiene el síndrome del cabello impeinable quiere enseñarle a la niña que “lo diferente es bello”.
Cuando Layla tenía aproximadamente un año, le diagnosticaron esta enfermedad, de la que apenas hay una centena de casos registrados en el mundo.
Charlotte afirma que el cabello de la niña, actualmente de 3 años, está siempre “esponjoso” porque carece de proteínas y crece de forma diferente y “hacia afuera”.
“Nosotros no la tratamos de manera diferente, pero el resto del mundo sí”, dice.
El síndrome del cabello inpeinable, también llamado pili trianguli et canaliculi, es una rara afección causada por una mutación genética.