Un importante ensayo técnico en las instalaciones de SpaceX en Starbase, Texas, culminó de manera inesperada este jueves 19 de junio de 2025, cuando un prototipo del cohete Starship experimentó una falla crítica durante una prueba en tierra.
El vehículo, identificado como “Starship 36”, se encontraba en una fase de preparación para lo que sería su décima misión de prueba de vuelo. Según confirmó la compañía de Elon Musk a través de la red social X (antes Twitter), el cohete “sufrió una anomalía mayor” mientras estaba anclado a su banco de pruebas.
Un video que circuló en redes sociales, confirmado por autoridades del condado de Cameron, muestra el momento exacto en que una intensa luminosidad emana de la base del cohete, seguida de una violenta explosión que desintegró el prototipo.
Afortunadamente, y como máxima prioridad en este tipo de operaciones, SpaceX aseguró que se mantuvo un estricto perímetro de seguridad durante todo el procedimiento. La compañía emitió un comunicado para confirmar la noticia más importante: “todo el personal está sano y salvo”.
Las autoridades locales también corroboraron que el incidente ocurrió durante una prueba estática y que no había ningún lanzamiento programado para esa noche. Estos ensayos son fundamentales en el desarrollo de cohetes, ya que permiten identificar y corregir fallos en un entorno controlado antes de un vuelo real.