Bomberos en varias regiones de Estados Unidos enfrentan incendios forestales que han provocado un deceso y múltiples evacuaciones. En el condado de Ventura, California, el “incendio Mountain” ha obligado a miles de residentes a huir de sus hogares, mientras los fuertes vientos de Santa Ana han alimentado las llamas. Hasta el lunes, el fuego estaba contenido en un 36%, tras arrasar más de 83 km² y destruir más de 170 estructuras.
En Nueva York y Nueva Jersey, el incendio Jennings Creek se extendió a lo largo de 12 km², dejando una persona fallecida: Dariel Vasquez, un joven trabajador del Departamento de Parques que perdió la vida al caerle un árbol mientras apoyaba a los equipos de bomberos. Las llamas, alimentadas por la sequía y ráfagas de viento, afectaron también la calidad del aire, y varias áreas emitieron alertas de salud el fin de semana.
Otros incendios en el noreste han causado la suspensión de eventos, incluida la ceremonia del Día de los Veteranos en West Milford, Nueva Jersey. En Massachusetts, las llamas consumieron 162 hectáreas en la Reserva Lynn Woods, donde las condiciones de sequía y hojas secas han complicado el combate de incendios.
