El expresidente Donald Trump fue elegido como el 47º presidente de Estados Unidos el miércoles, tras una reñida contienda en la que se impuso en varios estados decisivos, incluyendo Pensilvania y Wisconsin. En el sistema electoral estadounidense, los resultados se determinan por estados, y la suma de victorias en áreas clave permitió a Trump alcanzar los votos necesarios para asegurar su retorno a la Casa Blanca.
El miércoles por la mañana, Trump agradeció a sus seguidores en un evento en Florida, donde celebró lo que describió como “el mayor movimiento político de todos los tiempos”. Además, afirmó su compromiso de trabajar por “un Estados Unidos fuerte, seguro y próspero”.
Con esta victoria, Trump se convierte en el primer presidente estadounidense desde Grover Cleveland en cumplir mandatos no consecutivos. En cuanto a la política exterior, se espera que su administración continúe abordando temas de comercio y seguridad en el ámbito internacional, especialmente en las relaciones con China.
Mientras tanto, Kamala Harris, su principal oponente en la contienda, no se dirigió al público la noche de las elecciones, aunque se espera que haga una declaración en las próximas horas. Las complejas reglas de conteo en distintos estados contribuyeron a un proceso de recuento prolongado, mientras ambos equipos estaban preparados para posibles impugnaciones legales.
El próximo presidente tomará posesión el 20 de enero, en un contexto de grandes desafíos nacionales e internacionales.