La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró que es posible evitar una guerra arancelaria con Estados Unidos, tras una llamada con Donald Trump, presidente electo de dicho país. Su declaración generó expectativas, pero dejó algunas dudas sobre los compromisos asumidos por ambas partes.
En su conferencia matutina, Sheinbaum afirmó categóricamente: “No va a haber potencial guerra arancelaria”. Esto ocurrió luego de que Trump publicara en redes sociales que México había acordado frenar la migración no autorizada hacia territorio estadounidense. Por su parte, Sheinbaum escribió que se están atendiendo a los migrantes y las caravanas antes de llegar a la frontera. Sin embargo, no quedó claro si esto responde a un acuerdo reciente o a las políticas vigentes.
Migración y Caravanas: Una Realidad Compleja
Desde hace años, México ha implementado medidas para controlar la migración irregular, incluyendo la contención de caravanas en el sur del país. Aunque las primeras caravanas, en 2018 y 2019, lograron avanzar en conjunto hacia el norte, las autoridades han endurecido sus acciones, devolviendo a migrantes hacia la frontera con Guatemala o impidiendo su avance.
Esta dinámica ha limitado significativamente el impacto de las caravanas en los últimos años. Las declaraciones de Sheinbaum parecen aludir a una continuidad en estas políticas, más que a un cambio o compromiso específico derivado de la conversación con Trump.
Impacto Comercial y Preocupaciones por los Aranceles
Mientras tanto, en Estados Unidos, el presidente Joe Biden expresó su esperanza de que Trump reconsidere su intención de imponer aranceles del 25 % a productos mexicanos y canadienses, argumentando que podría dañar las relaciones con sus aliados. Entre los sectores más preocupados en México se encuentra el aguacatero. Si los aranceles elevan los precios para los consumidores estadounidenses, productos como el guacamole podrían enfrentar una reducción significativa en su demanda.
Pese a la confianza manifestada por Sheinbaum, la incertidumbre persiste en diversos sectores económicos que dependen del comercio bilateral con Estados Unidos.
