En un gesto significativo de diálogo interreligioso, el Papa Francisco visitó la emblemática mezquita Istiqlal en Yakarta, Indonesia, el jueves pasado. Este encuentro, que reunió a líderes de las seis religiones oficialmente reconocidas en el país, marcó un hito en la promoción de la armonía religiosa y la cooperación global.
El pontífice y el gran imán Nasaruddin Umar firmaron la “Declaración Conjunta de Istiqlal”, un documento que condena el uso de la religión para justificar la violencia y aboga por la protección del medio ambiente. Este acuerdo subraya la importancia de la acción conjunta frente a desafíos globales como el cambio climático y la intolerancia religiosa.
Un momento particularmente emotivo fue la visita al “Túnel de la amistad”, que conecta la mezquita con la catedral católica cercana, simbolizando el puente entre diferentes credos. El Papa Francisco destacó este pasaje como un poderoso símbolo de cómo las distintas tradiciones religiosas pueden guiar a la humanidad hacia la luz.
A pesar de los esfuerzos de Indonesia por promover la libertad religiosa, Amnistía Internacional reportó 123 casos de intolerancia entre 2021 y 2024, evidenciando los desafíos persistentes en esta área.
La visita del Papa, que forma parte de un viaje de 11 días por Asia y Oceanía, busca fortalecer los lazos entre católicos y musulmanes, una prioridad de su papado. Con solo un 3% de católicos en Indonesia, el país más poblado de mayoría musulmana, este encuentro resalta la importancia del diálogo interreligioso en la construcción de sociedades más inclusivas y pacíficas.
El viaje continuará con visitas a Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur, consolidando los esfuerzos del Vaticano por fomentar la comprensión mutua y la cooperación entre diferentes credos a nivel global.