Pyongyang celebró recientemente la incorporación de un importante número de lanzamisiles con capacidad nuclear a sus fuerzas armadas, en un evento que ha disparado las alarmas en la comunidad internacional. El líder norcoreano, Kim Jong Un, presidió la ceremonia donde reafirmó su compromiso con el fortalecimiento del programa nuclear del país.
Según informes de medios estatales, se entregaron 250 nuevos lanzadores diseñados para misiles balísticos tácticos a unidades de primera línea. Kim destacó que este equipo proporcionará a sus tropas una ventaja significativa en términos de potencia de fuego frente a Corea del Sur, haciendo más eficiente el despliegue de armas nucleares tácticas.
El evento, que incluyó una impresionante exhibición de los vehículos lanzamisiles y fuegos artificiales, se llevó a cabo en Pyongyang ante miles de espectadores. Las imágenes difundidas muestran largas filas de camiones militares equipados con los nuevos sistemas de lanzamiento.
Esta demostración de fuerza se produce en un contexto de creciente preocupación internacional por las ambiciones nucleares de Corea del Norte. Kim ha expresado abiertamente su intención de desplegar armas nucleares a lo largo de la frontera intercoreana y ha autorizado el uso de ataques nucleares preventivos si percibe amenazas contra su régimen.
Expertos señalan que estas acciones podrían ser parte de una estrategia para presionar a Estados Unidos a reconocer a Corea del Norte como potencia nuclear y levantar las sanciones impuestas. Además, se especula que Pyongyang podría estar buscando aumentar las tensiones en un año electoral en EE.UU.
La comunidad internacional observa con preocupación estos desarrollos, que representan un desafío significativo para la estabilidad en la región y los esfuerzos de no proliferación nuclear.