Los Ángeles, EE.UU. – El Departamento de Defensa de Estados Unidos anunció la retirada de 700 marines que habían sido enviados a Los Ángeles en respuesta a una serie de manifestaciones relacionadas con operativos migratorios realizados en junio.
Según informó el portavoz del Pentágono, Sean Parnell, la decisión se tomó tras evaluarse que la situación en la ciudad ha recuperado la estabilidad. La presencia de los infantes de marina tenía como objetivo principal apoyar la seguridad durante las concentraciones, algunas de las cuales derivaron en tensiones con las fuerzas del orden.
Este repliegue se suma al retiro previo de 2.000 miembros de la Guardia Nacional, desplegados inicialmente junto a los marines para reforzar la seguridad en zonas clave, proteger edificios gubernamentales y respaldar a las autoridades locales.
El despliegue militar se realizó sin el consentimiento del gobernador de California, Gavin Newsom, lo que provocó desacuerdos con el gobierno federal. No obstante, un tribunal de apelaciones respaldó la autoridad presidencial para mantener a las tropas en la ciudad.
Las manifestaciones surgieron como respuesta a los operativos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Aunque en su mayoría fueron pacíficas, algunas registraron momentos de tensión. La retirada de las fuerzas indica que, por ahora, el clima en la ciudad se ha estabilizado.
