El presidente de Costa Rica, Rodrigo Cháves, anunció que un grupo de aproximadamente 200 migrantes deportados de Estados Unidos, provenientes de países como Uzbekistán, Pakistán, Kirguistán, Kazajistán e India, podría permanecer en territorio costarricense hasta seis semanas antes de ser repatriados a sus países de origen.
Un acuerdo solicitado por EE.UU.
Según Cháves, la solicitud provino del gobierno estadounidense, que pidió la colaboración de Costa Rica para albergar temporalmente a los migrantes mientras se organizan los vuelos de retorno. Entre los deportados se encuentran alrededor de 50 menores de edad.
“Su estancia será por el tiempo estrictamente necesario, aproximadamente entre cuatro y seis semanas”, detalló el mandatario.
Albergue temporal sin posibilidad de salida
Durante su permanencia en Costa Rica, los migrantes serán alojados en un refugio destinado a inmigrantes, donde deberán permanecer sin posibilidad de salir hasta que se complete su proceso de deportación a sus respectivos países.
