El fallido atentado contra Donald Trump el 13 de julio de 2024 en Pensilvania ha tenido repercusiones inesperadas en los mercados financieros. A pesar de que el expresidente resultó ileso tras recibir un disparo en la oreja derecha, el incidente ha generado una ola de especulación sobre sus posibilidades de victoria en las próximas elecciones presidenciales.
Los inversores han reaccionado rápidamente, impulsando las acciones de empresas que podrían beneficiarse de un eventual regreso de Trump a la Casa Blanca. Entre los sectores más favorecidos se encuentran las criptomonedas, las prisiones privadas y las empresas asociadas directamente con el magnate.
Trump Media & Technology Group (TMTG), matriz de la plataforma Truth Social, experimentó un aumento vertiginoso del 67% en sus acciones. Este incremento refleja la confianza de los inversores en las perspectivas políticas de Trump, cuya participación en la compañía está valorada en miles de millones de dólares.
El entusiasmo también alcanzó al sector de las criptomonedas, con importantes subidas para empresas como Coinbase Global y las mineras de bitcoin Riot Platforms y Marathon Digital. Los analistas atribuyen este impulso a la postura favorable de Trump hacia las monedas digitales.
Otros beneficiarios incluyeron fabricantes de armas y operadores de prisiones privadas, sectores que tradicionalmente se han asociado con las políticas de Trump. Las acciones de Smith & Wesson, Geo Group y CoreCivic registraron aumentos significativos.
A pesar de estas fluctuaciones en sectores específicos, el mercado general se mantuvo relativamente estable, con un modesto aumento en los futuros del S&P 500.
Este evento ha puesto de manifiesto cómo los acontecimientos políticos pueden influir rápidamente en los mercados financieros, especialmente en sectores sensibles a las políticas gubernamentales. Sin embargo, los analistas advierten que estas tendencias podrían ser de corta duración y recomiendan cautela a los inversores.