Ciudad de Panamá – El Gobierno panameño ha comenzado a exportar el concentrado de cobre almacenado en la mina Cobre Panamá, operada por la empresa canadiense First Quantum Minerals. Esta mina, la más grande del país, se encuentra inactiva desde noviembre de 2023, luego de una decisión de la Corte Suprema que declaró inconstitucional su contrato de concesión.
El ministro de Ambiente, Juan Carlos Navarro, explicó que el traslado del concentrado, considerado altamente tóxico, busca evitar daños al medio ambiente y proteger la salud pública. Aunque no se revelaron los destinos de exportación, el funcionario subrayó que su ministerio solo supervisa los temas ambientales.
En marzo, el presidente José Raúl Mulino autorizó la salida de unas 120.000 toneladas del mineral y la importación de carbón para activar una planta termoeléctrica clave en el sistema energético nacional.
Por su parte, el Ministerio de Comercio e Industrias instruyó a Minera Panamá —filial de First Quantum— a ejecutar un plan de manejo seguro del yacimiento. Para financiarlo, la empresa confirmó el envío de 121.000 toneladas métricas secas de cobre concentrado.
Este plan fue presentado por la minera en enero de 2024, como parte de un compromiso ante el gobierno anterior. La mina Cobre Panamá abarca cerca de 13.000 hectáreas, con reservas que superan los 3.000 millones de toneladas, y es crucial para el PIB y el empleo del país.
El presidente Mulino ha propuesto establecer una “asociación real” con la compañía para reactivar el proyecto, mientras que organizaciones ambientales insisten en mantener la mina cerrada por sus impactos ecológicos. Al mismo tiempo, trabajadores y gremios empresariales presionan por su reapertura. Como gesto de buena voluntad, la minera canadiense ha pausado demandas internacionales contra el Estado para facilitar el diálogo sobre el futuro de la explotación.
