La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció que está considerando la posibilidad de enviar combustible a Cuba, país que enfrenta severos apagones desde el viernes debido a una crisis en su sistema eléctrico. Durante su conferencia matutina, Sheinbaum explicó que su gobierno está evaluando si esta asistencia humanitaria es necesaria para aliviar la difícil situación del pueblo cubano.
Esta crisis en Cuba recuerda una acción previa de México en 2023, cuando se enviaron alrededor de 200 millones de dólares en petróleo al país caribeño, según estimaciones del Instituto de Energía de la Universidad de Texas. En aquella ocasión, Petróleos Mexicanos (Pemex) aclaró que no se trató de una donación, sino de un acuerdo comercial.
Actualmente, la ayuda de México a Cuba se ha centrado en el “apoyo técnico” de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), según informó la mandataria. Sheinbaum aseguró que su gobierno está comprometido con la cooperación y que la CFE mantiene una comunicación constante con las autoridades cubanas para atender sus necesidades energéticas.
La crisis eléctrica en Cuba ha llegado a un punto crítico, con más de un tercio de la isla afectada por apagones, de acuerdo con los informes de la estatal Unión Eléctrica. La situación, que se ha deteriorado desde agosto, ha sido provocada por la escasez de combustible y el deterioro de las centrales termoeléctricas, muchas de las cuales superan los 40 años de funcionamiento y carecen de inversiones necesarias para su mantenimiento.
Sheinbaum, quien asumió la presidencia el 1 de octubre, reiteró que México siempre ha mostrado solidaridad a través de la ayuda humanitaria, manteniéndose firme en su oposición al bloqueo económico impuesto a Cuba. Señaló que esta postura contrasta con la de algunos expresidentes que adoptaron enfoques más distantes hacia la isla.
La presidenta subrayó que el bloqueo perjudica principalmente al pueblo cubano y defendió el derecho de los países a decidir su propia forma de gobierno y organización política. Esta visión está en línea con la política exterior histórica de México, que promueve el respeto a la soberanía de las naciones.