Vivir en Estados Unidos sin documentos puede generar incertidumbre, pero aun así es posible resguardar el patrimonio construido con esfuerzo. Existen opciones legales, financieras y administrativas que no requieren estatus migratorio y que ayudan a garantizar que los bienes estén seguros y accesibles para la familia en caso de emergencia.
1. Asegurar la Titularidad de los Bienes
Las personas sin estatus migratorio pueden poseer propiedades y otros activos en EE.UU. Para fortalecer la protección:
- Registrar los bienes utilizando un ITIN o un pasaporte válido.
- En situaciones de mayor valor o riesgo, considerar la creación de una LLC o un fideicomiso en vida (living trust).
Estas herramientas permiten separar el patrimonio personal de posibles conflictos legales y facilitan la transferencia ordenada de los bienes a los familiares.
2. Nombrar Beneficiarios y Apoderados
Contar con instrucciones claras sobre quién podrá administrar o recibir los recursos en caso de emergencia es esencial.
- En cuentas bancarias, se puede designar un beneficiario POD (Payable on Death) para que la persona autorizada acceda a los fondos en caso de fallecimiento del titular.
- También es recomendable otorgar un Poder Notarial (Power of Attorney) a una persona de confianza para que pueda manejar cuentas, pagar gastos o realizar trámites si el titular enfrenta una situación inesperada.
Estos procesos deben hacerse directamente en el banco o con un notario, preferiblemente con orientación profesional.
3. Cuidar las Finanzas Personales
Para reducir riesgos:
- Evitar guardar grandes cantidades de dinero en efectivo.
- Abrir cuentas bancarias con ITIN, ya que muchas instituciones financieras las aceptan.
- Mantener el dinero a nombre propio para evitar conflictos o disputas.
- Presentar declaraciones de impuestos con ITIN, lo cual fortalece la estabilidad financiera y puede ser útil en futuros trámites migratorios.
4. Mantener Cumplimiento Legal y Fiscal
Tener documentos y pagos en regla brinda seguridad ante cualquier revisión o disputa.
- Declarar impuestos cada año.
- Pagar impuestos sobre propiedades.
- Guardar comprobantes de compras, pagos y registros financieros.
Estas prácticas demuestran responsabilidad y protegen el patrimonio frente a eventuales reclamos.
5. Buscar Asesoría Profesional
La orientación adecuada marca una gran diferencia.
- Un abogado especializado en inmigración y planificación patrimonial puede guiar sobre cómo proteger bienes sin generar riesgos migratorios.
- Organizaciones comunitarias y notarías legales también ofrecen apoyo accesible y confiable.
Proteger el patrimonio no depende del estatus migratorio, sino de la planificación. Con asesoría correcta y documentos en orden, cualquier persona puede asegurarse de que su trabajo y bienes estén resguardados y que su familia pueda acceder a ellos sin complicaciones.







