Más de 70,000 personas sin electricidad
Hasta la mañana del domingo, cerca de 70,000 clientes seguían sin servicio eléctrico en California, siendo el condado de Los Ángeles el más afectado, según el sitio PowerOutage.us. La región enfrenta daños significativos en su infraestructura de energía, agua y alcantarillado, según reportaron las autoridades locales.
Alerta por vientos y riesgo de incendios
El Servicio Meteorológico Nacional emitió advertencias por los vientos de Santa Ana, que podrían intensificar los incendios forestales. Las condiciones de sequía extrema, con más de ocho meses sin lluvias importantes, han transformado pequeños incendios en devastadores eventos que han arrasado vecindarios enteros.
Impacto en comunidades y figuras públicas
Miles de personas han sido evacuadas y numerosas viviendas han quedado destruidas, incluidas las de celebridades como Billy Crystal, Mandy Moore y JJ Redick. Sin embargo, no solo las mansiones han sido afectadas. En Altadena, un vecindario histórico de familias afroamericanas, muchas propiedades con décadas de historia han sido reducidas a cenizas.
Los incendios también destruyeron templos religiosos, entre ellos una mezquita, una sinagoga, una parroquia católica y varias iglesias protestantes, marcando un golpe significativo a la diversidad cultural y religiosa de la región.
Investigación en curso sobre las causas
Aunque aún no se ha determinado la causa exacta, se han descartado rayos como origen de los incendios. Los expertos ahora investigan posibles fallas en el cableado eléctrico o la posibilidad de que hayan sido provocados intencionalmente.
Eventos pospuestos y reprogramados
La crisis ha alterado múltiples eventos. Los Critics Choice Awards se trasladaron al 26 de enero, mientras que la NFL cambió el partido entre los Rams y los Vikings a Arizona. La NBA también pospuso encuentros, aunque algunos juegos en Los Ángeles podrían reanudarse esta semana.
Acusaciones de fallas gubernamentales
Las críticas hacia los líderes locales y estatales no se han hecho esperar. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, y el gobernador Gavin Newsom enfrentan cuestionamientos sobre la falta de recursos y preparación para enfrentar esta crisis. La jefa de bomberos de la ciudad, Kristin Crowley, denunció la escasez de fondos y de agua, señalando una gestión ineficiente ante esta emergencia.
