Estados Unidos enfrenta condiciones climáticas adversas mientras se acerca el feriado de Acción de Gracias. Las tormentas invernales y lluvias intensas han afectado diversas regiones, causando complicaciones en el transporte y alterando los planes de viaje.
En los estados del norte, las nevadas han generado acumulaciones significativas, mientras que en el sur, las lluvias han provocado inundaciones aisladas. Las autoridades piden precaución a los conductores debido a carreteras resbaladizas y visibilidad reducida.
Por si fuera poco, los meteorólogos advierten que un nuevo sistema climático podría impactar justo antes del feriado, trayendo más lluvia, viento y nieve a varias partes del país. Esto podría complicar aún más los desplazamientos de millones de personas que se preparan para reunirse con sus familias.
Se recomienda a la población monitorear los pronósticos locales y ajustar sus planes según las condiciones climáticas para garantizar su seguridad.
En el noreste, que ha sido golpeado por la sequía, se esperaban más de 5 centímetros de lluvia para el sábado por la mañana al norte de la ciudad de Nueva York, con nieve mezclada en elevaciones más altas. Se espera que la precipitación ayude a aliviar las condiciones de sequía en un estado que ha visto un otoño excepcionalmente seco.
Cayó nieve pesada en el noreste de Pensilvania, incluidas las montañas Pocono, provocando una serie de cierres escolares. Las elevaciones más altas reportaron hasta 43 centímetros, con acumulaciones menores en ciudades del valle como Scranton y Wilkes-Barre.
Partes de Virginia Occidental también experimentaron su primera nevada significativa de la temporada, con hasta 25,4 centímetros acumulados en las elevaciones más altas de las montañas Allegheny. Algunas áreas estuvieron bajo una advertencia de tormenta de nieve mientras los vientos racheados hacían peligrosas las condiciones de viaje.