Los precios de la gasolina están aumentando a gran velocidad. Cuando la pandemia golpeó el año pasado, los estadounidenses se confinaron, la demanda de gasolina se desplomó y los precios bajaron.
En abril pasado, el precio de la gasolina cayó por debajo de dos dólares el galón por primera vez en cuatro años, de acuerdo con datos del gobierno. Pese a esto, se espera que el costo del combustible ha aumentado y seguirá aumentando en las próximas semanas.
Incluso, las proyecciones apuntan a que las alzas seguirán hasta el verano. El costo del crudo ha aumentado porque la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha impulsado la producción masiva del petróleo y sus derivados.
El petróleo llegó a costar 60 dólares el barril, este mes, por primera vez en más de un año. El clima invernal en Texas ha afectado a la producción petrolera, lo que obligó a cerrar las refinerías.
Si los suministros no se mantienen al día, esa demanda significará mayores precios del combustible, , esto sin duda serán un golpe para los bolsillos de los ciudadanos.
Por como se están dando las proyecciones los automovilistas deberán pagar en algunas zonas del país $3 dólares más por galón durante el verano.