En Moore, Oklahoma, la familia Kuryk enfrenta una situación desafiante cada vez que la lluvia hace acto de presencia. Desde su llegada hace seis meses, las inundaciones recurrentes en su patio trasero se han convertido en una fuente constante de preocupación. Sierra Kuryk describe su patio como un “lago” en los momentos de mayor precipitación, expresando su frustración ante lo que percibe como un problema evitable.
La raíz del inconveniente, según Kuryk, radica en un desagüe pluvial que vierte grandes cantidades de agua directamente hacia su campo séptico y una estructura de su propiedad. A pesar de haber comunicado la situación a los líderes de la ciudad de Moore desde su mudanza, Kuryk afirma que aún no se ha establecido un plan concreto para solucionar el problema.
Por su parte, la ciudad de Moore emitió un comunicado a Fox 25, detallando las acciones tomadas hasta el momento. Según el municipio, se ha revisado el informe de drenaje y la ingeniería del estanque de retención que desagua en la propiedad de Kuryk. Ingenieros consultores han verificado que se cumplen todos los códigos de la ciudad, que el punto de descarga es histórico y no desvía agua hacia áreas previamente no afectadas, y que el volumen de escorrentía no ha aumentado con el desarrollo del vecindario Broadmoore Heights.
Adicionalmente, personal de la ciudad y el ingeniero consultor realizaron una visita al sitio para identificar posibles mejoras que alivien las preocupaciones de Kuryk. Sin embargo, la ubicación desconocida de las líneas laterales del sistema séptico ha impedido el desarrollo de planes de mitigación definitivos. A pesar de esto, la ciudad asegura estar explorando otras opciones para mejorar la estructura de desagüe, buscando dirigir el flujo de agua hacia una zanja de drenaje existente en la propiedad de Kuryk.
Sierra Kuryk considera que la ciudad debería haber gestionado un derecho de paso hacia la carretera para integrar el drenaje directamente al sistema municipal. “Están vertiendo todo en nuestra propiedad y afirmando que puede soportarlo cuando claramente no es así”, lamenta Kuryk, quien espera que las autoridades reconozcan el problema y colaboren en su resolución. Para ella, su propiedad se ha convertido en un estanque de retención inutilizable.
Kuryk informó que la ciudad se comprometió a revisar la situación en su vecindario el viernes por la mañana.