El Departamento de Conservación de Vida Silvestre de Oklahoma enfrenta su temporada más activa con una significativa escasez de personal. Actualmente, hay 13 vacantes para guardabosques en todo el estado, lo que representa un déficit del 10% en la plantilla. Según el Teniente Coronel Wade Farrar, jefe asistente de la Ley de Conservación, esta es la mayor cantidad de puestos vacantes que han tenido de forma simultánea.
“Alrededor de la mitad de los guardabosques se retiraron, y la otra mitad dejó sus cargos en busca de mejores salarios y beneficios de jubilación”, explicó Farrar. Los guardabosques tienen la responsabilidad de hacer cumplir las leyes de caza y pesca, además de garantizar la seguridad pública en áreas naturales. “Tenemos poderes policiales completos, pero nuestra prioridad diaria son las normas de caza y pesca”, agregó.
Con la temporada de caza de venado en pleno apogeo, la falta de personal deja a los guardabosques actuales sobrecargados de trabajo. “Hay 26 ojos menos vigilando a los cazadores furtivos”, mencionó Farrar. Por esta razón, el departamento está recurriendo al apoyo de la comunidad para denunciar actividades sospechosas que puedan facilitar investigaciones y prevenir delitos contra la fauna.
Aunque se están preparando para contratar a 11 nuevos guardabosques, el proceso es lento, ya que cada recluta debe completar entrenamientos que pueden extenderse hasta un año antes de estar completamente operativo en el campo. Según Farrar, las solicitudes para nuevos reclutas se reabrirán en octubre del próximo año.