Oklahoma City, OK – La saga de una inusual persecución a baja velocidad que capturó la atención en redes sociales ha dado un nuevo giro. Ashley Lambert, la conductora del Porsche que protagonizó un lento seguimiento por la autopista Kilpatrick Turnpike el 12 de julio, ahora enfrenta acusaciones adicionales tras un presunto altercado en el centro de detención.
El incidente inicial, que se viralizó en plataformas como TikTok, mostró a un Porsche desplazándose a baja velocidad mientras agentes del Departamento de Policía de Oklahoma City (OKCPD) le realizaban múltiples Maniobras Tácticas de Intervención Vehicular (TVI) en un intento por detenerla. Grabaciones de la cámara de tablero (dash cam) de la policía, ahora públicas, revelan la persistencia de los oficiales para concluir la situación de manera segura.
Tras su arresto en la autopista, Lambert fue puesta en libertad bajo fianza el 15 de julio. Sin embargo, su salida del Centro de Detención del Condado de Oklahoma estuvo marcada por un nuevo incidente. Según un afidávit, Lambert presuntamente agredió a un oficial que la escoltaba fuera de las instalaciones.
El documento detalla que, al intentar esposarla para el traslado, Lambert abofeteó al oficial. Durante el forcejeo subsiguiente para controlarla, la mujer también habría pateado al agente en el pecho. El informe describe el comportamiento de Lambert como “maníaco e irracional” mientras era finalmente inmovilizada.
Este nuevo cargo por agresión y lesiones se suma a las posibles infracciones derivadas de la peculiar persecución, añadiendo una nueva dimensión a un suceso que ya había captado la atención del público por su extrañeza.
