Israel llevó a cabo un bombardeo este lunes sobre el puerto de Al Hudeida, en Yemen, como respuesta al lanzamiento de un misil por parte del grupo rebelde hutí. El proyectil impactó el domingo en el aeropuerto internacional Ben Gurión, ubicado en Tel Aviv, dejando un saldo de seis personas heridas, según informaron fuentes oficiales.
Este ataque marca la primera acción militar israelí en suelo yemení desde que retomó sus operaciones en Gaza el pasado 18 de marzo. Durante este periodo, los hutíes han lanzado múltiples misiles hacia territorio israelí, todos interceptados excepto el que alcanzó su objetivo este fin de semana.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, había anticipado que la respuesta llegaría “en el momento y lugar adecuados”, señalando directamente a Irán como presunto instigador detrás de los ataques hutíes. Desde Teherán, el Ministerio de Exteriores negó toda implicación, calificando las acusaciones de “infundadas” y advirtiendo sobre las consecuencias de cualquier ofensiva contra su nación.
Tras el ataque, los hutíes anunciaron su intención de imponer un “bloqueo aéreo total” sobre Israel, mediante una serie de ataques dirigidos a sus aeropuertos. Asimismo, instaron a las aerolíneas internacionales a suspender vuelos con destino a Israel por motivos de seguridad. Algunas compañías aéreas ya habían decidido interrumpir temporalmente sus rutas hacia ese país, ante el aumento de las tensiones en la región.