Panamá, 21 de agosto de 2024 – En un esfuerzo por contener la migración irregular a través de la peligrosa selva del Darién, Panamá deportó el martes a 29 ciudadanos colombianos que habían cruzado la frontera de manera ilegal. Entre los deportados se encontraba un presunto miembro del poderoso cartel del narcotráfico Clan del Golfo.
Este vuelo de deportación es el primero desde que Panamá y Estados Unidos firmaron un acuerdo migratorio a principios de julio. El acuerdo también contempla la repatriación voluntaria de venezolanos que han cruzado la frontera por el Darién.
“El tema de Venezuela tiene una particularidad por las restricciones diplomáticas, lo que nos impide realizar movimientos hacia ese país”, explicó Roger Mojica, director del Servicio Nacional de Migración de Panamá. “Debemos tener cuidado de no poner en peligro a las personas que estaríamos retornando”.
Más de medio millón de migrantes, en su mayoría venezolanos, ecuatorianos, colombianos y chinos, cruzaron la peligrosa ruta del Darién el año pasado en su intento por llegar a Estados Unidos. El nuevo gobierno panameño, bajo el liderazgo del presidente José Raúl Mulino, ha implementado medidas como el cierre de puntos de entrada y el establecimiento de un “corredor” más seguro para el tránsito de migrantes, lo que ha logrado reducir el flujo en un 30% en lo que va de agosto.
Sin embargo, las autoridades advierten que la crisis postelectoral en Venezuela podría generar un nuevo éxodo migratorio a través del Darién. Panamá y Estados Unidos continuarán trabajando juntos para abordar este desafío humanitario y de seguridad.