Un detective le aseguró que si se inculpaba en un crimen podría irse a su casa, pero en lugar de eso pasó 25 años en prisión.
Tenía 20 años cuando su camino se cruzó con el del detective Reynaldo Guevara, quien lo acusó a él y a otro hombre llamado Thomas Kelly de haber asesinado a golpes a Daniel García, crimen ocurrido el 12 de octubre de 1998 en un callejón.