Chicago (EE.UU.) – EFE.
El alcalde de Chicago, Brandon Johnson, reiteró su compromiso con la protección de las llamadas “zonas seguras” para la comunidad migrante, advirtiendo que los agentes federales que ignoren las leyes locales podrían enfrentar consecuencias legales.
Durante una conferencia de prensa, Johnson explicó que su reciente orden ejecutiva busca impedir que agencias federales como el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) utilicen espacios públicos bajo control de la ciudad para realizar redadas.
El mandatario local señaló que las autoridades municipales están “explorando todos los mecanismos disponibles” para hacer cumplir esta disposición, subrayando que Chicago tiene el deber de proteger tanto su autonomía como la seguridad de sus habitantes.
Johnson enfatizó que quienes actúen fuera del marco legal deben responder por sus actos: “Cualquiera que viole una norma debe rendir cuentas. Esa es la base del orden público”, afirmó.
El alcalde también hizo un llamado a la calma, destacando que la ciudad seguirá siendo un espacio de convivencia y respeto para todos sus residentes, sin importar su origen. En este sentido, animó a la población a no dejarse llevar por el miedo y a seguir participando en la vida comunitaria.
De cara al Maratón de Chicago, que se celebrará este domingo con la participación de unos 3,000 corredores mexicanos, Johnson expresó su deseo de que el evento transcurra con normalidad y en un ambiente de unidad.
Finalmente, criticó las medidas impulsadas por el gobierno federal, al considerar que incrementan la tensión social. “Chicago seguirá apostando por la paz, la justicia y el respeto mutuo”, concluyó.
