Cuba ha calificado como “irreal” e “injusta” la reciente propuesta del expresidente estadounidense Donald Trump, que busca deportar masivamente a inmigrantes indocumentados, incluidos posibles ciudadanos cubanos. Durante un diálogo migratorio bilateral en La Habana con una delegación del gobierno de Joe Biden, Carlos Fernández de Cossío, viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba, expresó que estas acciones deben basarse en acuerdos bilaterales y respetar los límites de la cooperación vigente.
“No es realista pensar en deportaciones masivas desde Estados Unidos hacia Cuba,” comentó Fernández de Cossío al finalizar la reunión. Además, resaltó que cualquier operación de esta magnitud no puede ejecutarse sin un análisis profundo de los acuerdos ya establecidos entre ambos países.
Desde su regreso al escenario político, Trump ha prometido una campaña intensa contra la inmigración irregular. Su plan incluye deportar un millón de personas al año, según estimaciones de su compañero de fórmula JD Vance. Sin embargo, la propuesta no contempla excepciones por nacionalidad, lo que genera preocupación entre diversas comunidades migrantes.
El nuevo responsable de las políticas fronterizas de Trump, Tom Homan, aseguró que estas deportaciones priorizarían a personas con antecedentes criminales o órdenes de deportación finales. Sin embargo, no especificó si habría consideraciones especiales para ciertos grupos.
Fernández de Cossío subrayó que Cuba ha aceptado un número limitado de deportaciones bajo la administración Biden, pero una medida masiva como la que plantea Trump sería inaceptable. Además, afirmó que esta iniciativa podría desarraigar a personas que ya han construido su vida en Estados Unidos.
“El embargo económico impuesto por Estados Unidos durante décadas ha sido un factor clave en la migración cubana hacia Florida. Aumentar las deportaciones solo profundizaría las injusticias y complicaría aún más las relaciones bilaterales”, concluyó el vicecanciller.
Defensores de los derechos de los inmigrantes advierten que un esfuerzo de deportación a gran escala sería costoso, inhumano y socialmente devastador, causando separación de familias y afectando a comunidades enteras.
