La mascota oficial de los Juegos Olímpicos de París 2024, Phryge, está causando revuelo entre locales y turistas. Este peculiar personaje triangular, que para algunos evoca la Torre Eiffel o incluso emoji poco convencionales, en realidad encierra un profundo significado para los franceses.
Phryge rinde homenaje al gorro frigio, un símbolo revolucionario con más de dos siglos de historia en Francia. Este accesorio, que se remonta a la época romana como emblema de la libertad, fue adoptado por los revolucionarios franceses en 1789 como manifestación de sus ideales de emancipación.
Tony Estanguet, presidente del Comité Organizador de París 2024, explica: “Representa la libertad y transmite un potente mensaje relacionado con la revolución que deseamos para estos juegos”. Esta elección refleja el deseo de vincular el evento deportivo con los valores fundamentales de la República Francesa.
La presencia de Phryge se hace notar en toda Francia. Los aficionados hacen cola para fotografiarse con versiones a tamaño real en las sedes olímpicas, mientras que su imagen adorna una amplia gama de productos oficiales, desde tazas hasta camisetas.
Sin embargo, la recepción de Phryge no ha estado exenta de controversia. Su forma ha generado comparaciones inesperadas, desde analogías anatómicas hasta interpretaciones más humorísticas. El Museo de la Vagina del Reino Unido incluso lo incluyó en una guía actualizada sobre anatomía, generando debate en redes sociales.
A pesar de las diversas interpretaciones, muchos visitantes se muestran entusiasmados con la mascota. Kevin Cahill, un turista, la describe como “increíble”, aunque admite desconocer su simbolismo. Por su parte, Pierre Leonardi, luciendo un gorro frigio, expresa: “Quería usarlo hoy, en memoria de Francia”.
Independientemente de las opiniones divididas, Phryge está cumpliendo su misión de generar conversación y despertar interés en los próximos Juegos Olímpicos. Su presencia en productos oficiales asegura que el espíritu de París 2024 se extienda por todo el mundo, llevando consigo un pedacito de la historia y los ideales franceses.
