El mundo del cine y el teatro llora la pérdida de James Earl Jones, un titán de la actuación cuya voz inconfundible dio vida a personajes que marcaron generaciones. El actor, nacido en Mississippi en 1931, falleció el lunes en su hogar en Nueva York a los 93 años.
Jones dejó una huella imborrable en la cultura popular como la voz de Darth Vader en la saga “Star Wars” y Mufasa en “El Rey León”. Su carrera, que abarcó más de seis décadas, incluyó casi 200 producciones cinematográficas y le valió el codiciado estatus EGOT (ganador de Emmy, Grammy, Oscar y Tony).
Debutó en el cine con la sátira de Kubrick “Dr. Strangelove” en 1964, pero fue su papel en “La gran esperanza blanca” lo que lo catapultó a la fama en 1970. Esta actuación le mereció una nominación al Oscar, aunque el reconocimiento de la Academia llegó finalmente en 2012 con un Oscar honorífico.
En Broadway, Jones brilló desde su debut en 1958 con “Amanecer en Campobello”. Sus interpretaciones en las tablas le otorgaron dos premios Tony, consolidando su versatilidad como actor.
La televisión también fue testigo de su talento. Jones recibió ocho nominaciones a los Emmy, ganando dos en 1991 por sus papeles en “La pasión de Gabriel” y “La rebelión”.
Más allá de los galardones, James Earl Jones será recordado por su presencia imponente, su voz profunda y su capacidad para dar vida a personajes inolvidables. Su legado perdurará en la memoria de fans y colegas por generaciones.