Una gira musical en los Andes centrales de Perú terminó en tragedia la madrugada del lunes cuando el autobús que transportaba a la orquesta “Antología del Folklore” se precipitó por un abismo de más de 200 metros. El siniestro, ocurrido cerca del poblado de Cochas Bajo a una altitud de 3.696 metros, dejó un saldo de nueve músicos fallecidos y once heridos, según informó la Fiscalía peruana.
Gilmer Venturo, uno de los sobrevivientes, relató a la radio RPP el terrible despertar en medio de la oscuridad, rodeado por los gritos de auxilio y quejidos de dolor de sus compañeros. El músico reveló la precaria situación laboral del grupo, que carece de seguro de trabajo o de vida, dependiendo únicamente de los ingresos de sus presentaciones.
Aunque las autoridades aún investigan las causas específicas de este accidente, estadísticas recientes señalan que la imprudencia, el exceso de velocidad y la conducción bajo efectos del alcohol son los principales factores en siniestros viales en Perú.
Este trágico evento subraya una vez más las deficiencias en la seguridad vial del país andino. Expertos llevan casi dos décadas advirtiendo sobre la necesidad de una reforma integral del transporte, destacando la débil vigilancia en carreteras y la frecuente desorganización en las labores de rescate. Según datos policiales, en 2023 se registraron 3.138 muertes y 58.082 heridos por accidentes de tránsito en Perú.
La pérdida de estos talentosos músicos no solo deja un vacío en la escena folclórica peruana, sino que también pone de manifiesto la urgente necesidad de mejorar la seguridad en las carreteras del país, especialmente en zonas de alto riesgo como las rutas andinas.
