Cientos de migrantes en Tapachula, Chiapas, solicitaron al Gobierno mexicano que interceda ante el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, para permitirles entrar al país. Gabriel Arroyo Aponte, migrante colombiano, expresó que su petición es que las autoridades mexicanas faciliten un diálogo para que Trump reconsidere su postura hacia los migrantes.
Arroyo señaló que, aunque Trump ha criticado a los migrantes, la mayoría solo busca mejorar las condiciones de vida de sus familias. Añadió que muchos enfrentan condiciones extremas en Tapachula, una ciudad colapsada por la falta de empleo y recursos, mientras esperan avanzar hacia la Ciudad de México.
Debido a las fuertes lluvias, los migrantes cancelaron una marcha planeada desde la estación migratoria Siglo XXI en conmemoración del Día Internacional del Migrante. En su lugar, Carlos Larios, migrante venezolano, destacó que la mayoría de los indocumentados solo quiere trabajar en Estados Unidos y contribuir a la economía. Larios espera cruzar la frontera antes de enero, cuando podrían cambiar las leyes migratorias, aunque aún está en proceso de obtener su cita con el sistema CBP One.
Bryan Douglas Velázquez, migrante guatemalteco, hizo un llamado al gobierno mexicano para reforzar la seguridad en la frontera sur, una de las zonas más peligrosas del país. Denunció que los migrantes son víctimas frecuentes de robos, agresiones y otros delitos. Además, pidió mayor apoyo alimentario y la presencia de la Guardia Nacional y Protección Civil para proteger a las familias que permanecen en la región.
Según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, el 92 % de los habitantes de la frontera sur perciben altos niveles de inseguridad, lo que agrava aún más la situación de los migrantes. A pesar de la disminución en las detenciones de migrantes en la frontera con Estados Unidos, México registró más de 712,000 migrantes irregulares en el primer semestre del año, un aumento del 193 % en comparación con el año anterior.
A pesar de las malas condiciones climáticas y los retrasos en el sistema CBP One, los migrantes en Tapachula planean organizar una nueva caravana hacia la Ciudad de México, en busca de mejores oportunidades y un futuro más prometedor.