El gobierno de Cuba anunció medidas de ahorro energético y restricciones, tras anunciar que en las próximas semanas volverá a escasear el combustible por dificultades financieras para su importación.
El viceprimer ministro y titular de Economía y Planificación, Alejandro Gil, informó en una comparecencia televisiva que en este momento hay “un nivel más reducido de combustibles”, lo que tendrá un “impacto real” en la situación económica del país, que atraviesa una grave crisis económica.
En este sentido Gil dijo que el gobierno ha realizado “una proyección” y se está “planificando al detalle” para el uso “más racional” del combustible en las próximas dos semanas. “La vida es dura, pero la única salida es la revolución y el socialismo”, argumentó el funcionario.
Indicó que las medidas de ahorro energético estarán dirigidas a asegurar “la vitalidad” de las principales actividades de la población y la economía como la agricultura, y áreas prioritarias como salud y turismo.
Reconoció que el transporte público sufrirá los efectos de las limitaciones de combustible y que se disminuirán y aplazarán algunas actividades sin carácter de urgencia.
Por su parte, el ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, explicó que Cuba consume unas 120.000 a 130.000 toneladas de combustible diésel mensualmente.
Advirtió que hay una situación “muy apretada” y “tensa” en estos días, y pronosticó que se producirán apagones diarios porque “no vamos a tener el nivel de combustible que necesitamos ni el que teníamos en meses anteriores”.